Un partido que iba a ser «perfecto»
Kyle Hendricks de Cachorros y Brandon Woodruff de Cerveceros, se enfrascaron en un duelo de abridores en el último juego de la serie en el Wrigley Field de Chicago.
Con un ritmo de juego perfecto, Woodrruff, se mantuvo intacto hasta el séptimo episodio cuando Ian Happ le conecta imparable, y los 10,343 aficionados permitidos desataron una discreta ovación.
Hendricks se bajó del duelo en la sexta con 85 lanzamientos realizados, 4 hits y ninguna carrera permitida.
La primera anotación del juego llegó en la octava con el bate de Lorenzo Caín que se la sacó por el jardín izquierdo al relevista de Chicago Alec Mills para el 1-0.
Woodruff se despidió después de 7 entradas de un hit, cero carreras y 74 lanzamientos, y en su lugar llegó Devin Williams que permite jonrón de 417 pies a Joc Pederson para empatar 1-1.
En alta de la décima Lorenzo Cain la volvió a botar, esta vez al lanzador Brandon Workman (perdedor), llevándose por delante a Daniel Robertson y Daniel Vogelbach para poner el marcador 4-1.
Para cerrar la décima, Jason Heyward impulsa a Kris Bryant la segunda carrera de los Cachorros, y con bases llenas el jardinero central Ian Happ es dominado por Brad Boxberger con elevado al izquierdo y se acaba la amenaza y el partido.
El triunfo se lo lleva el zurdo Josh Hader (2-0), derrota para Brandon Workman (0-1) y salvamento de Boxberger (1).
La cantidad máxima de aficionados permitidos al Wrigley Field fue de 10,343 como en los juegos anteriores.
Los Cachorros salen de gira a la casa de Piratas y Milwaukee, y regresan al Wrigley Field el viernes 16 de abril con los Bravos de Atlanta a la 1:20PM.
Craig Kimbrel hizo su trabajando retirando a tres bateadores en la 9a. 
Javier Báez se fue en blanco contra Milwaukee. 
Brandon Woodruff lanzó 7 entradas de un hit a los Cachorros. 
Kyle Hendricks sale sin decisión en 6 entradas de 4 hits.