Tricolor desilusiona a mexicano que vive en Sao Paulo

Por Ricardo Blancas Ávalos. Enviado

 Santos, Bra., 10 Jun. (Notimex).- El hecho de estar lejos de tu país, tener la oportunidad de tener contacto con la delegación que representa a México y no poder hacerlo, es algo que desilusiona y más desde la perspectiva de un mexicano que desde hace seis meses vive en Sao Paulo.

 El doctor Luis Velázquez, quien sólo pide que se le llame Luis, se especializa en ciencias de la ingeniería y realiza una investigación para la Universidad de Sao Paulo, por lo que se dio un tiempo para hacer el recorrido de 80 kilómetros a Santos, con el objetivo de ver de cerca al equipo mexicano que disputará la Copa del Mundo Brasil 2014.

 “Soy investigador, soy doctor en ciencias de la ingeniería y la Universidad de Sonora y la Universidad Paulista tienen un convenio de colaboración, ellos ya me habían pedido venir como tal, a realizar una investigación, entonces, eso fue desde el año pasado, preferí posponerlo este tiempo para poder hacerlo este semestre y tomarme el mes de junio viviendo la Copa”, dijo.

 Explicó que al saber que el Tri estaría en un sitio no tan lejano de su lugar de residencia no dudó en hacer el recorrido, sólo que esperaba un trato diferente al recibido.

“Ayer nos quedamos alrededor de hora y media y los jugadores salieron del hotel directo, a excepción del ´Chicharo´ (Javier Hernández), noté que ninguno saludó, no se paró nadie, ya en el autobús sólo levantaban la mano”, apuntó.

 Recordó que en Río de Janeiro “nos tocó ver la llegada de la selección de Holanda y todo muy sencillo, muy tranquilo, con el dispositivo de seguridad, pero cuando los jugadores se bajaron, no entraron directo al hotel, se quedaron”.

 “Al otro día nos fuimos a correr y ellos iban saliendo, ellos saludaron a la gente y (Arjen) Robben dio autógrafos, y ayer vi en la televisión que hicieron un entrenamiento en la playa con los reporteros corriendo, con su protocolo de seguridad”, apuntó.

 La pregunta que más lo inquietó era saber cómo era posible que el subcampeón del mundo tuviera más accesibilidad, caso contrario a lo que vivió con el conjunto que dirige Miguel Herrera.

 “Al final, las comparaciones no son buenas, pero uno dice ´cómo es posible que yo haya podido ver a (Arjen) Robben y a (Robin) van Persie a escasos centímetros y no puedo ver a Oribe, a Márquez, a Peña de cerquita´, ellos deben entender que son un símbolo, no comparado con la bandera ni el himno, pero sí representando al país”, acotó.

 Consideró que “todos los equipos no sólo deben mostrar futbol, también deben mostrar clase y agradecimiento a la afición, la afición mexicana es de las que más apoya al equipo”.

“Al final el Mundial es una fiesta no sólo de futbol, ellos tendrán su táctica, pero nada les cuesta cumplir con esa parte que para mí es clase, decir que le importa el aficionado no sólo en declaraciones, sino también en hechos”, indicó.

 Finalmente, pese a este desaire, espera que México ofrezca alegrías a la afición en esta justa mundialista, “y si no, pues no pasa nada, quedan estos momentos”.