Cachorros acaban con la maldición de la cabra
Miles de aficionados rodearon todo el Wrigley Field, y festejaron la primera Serie Mundial en 108 años de los Cachorros de Chicago, que conquistaron la noche del miércoles 2 de noviembre en Cleveland.
Pese a que el estadio estuvo completamente blindado, y nadie pudo acercarse a sus puertas, decenas de miles de personas se acercaron y siguieron las incidencias del partido que ganó Chicago a los Indios 8-7 en 1o entradas de juego.
Durante todo el encuentro, esa parte del barrio de Wrigleyville se vivió una fiesta, pero el silenció se apoderó de los fanáticos cuando vieron que Cleveland empataba el partido 6-6 en la novena entrada.
Cuando los Cachorros marcan el desempate, y se juega la parte baja del décimo episodio, comenzaron a llegar policias estatales para resguardar aún más el área que estuvo cubierta de policías municipales.
Cuando el reloj marcaba las 11:47 de la noche cayó el último out, y una lluvia de champaña empezó a caer sobre los fanáticos.
Chicago y Cleveland llegaron hasta el séptimo y decisivo partido de la Serie Mundial.